"Los animales son buenos amigos, no hacen preguntas y tampoco critican." George Elliot
viernes, 31 de mayo de 2013
martes, 21 de mayo de 2013
Propiedades estructurales
Vamos
a clasificar las propiedades en tres grupos, en los cuales vamos a encontrar
semejanzas entre comunicación animal y humana (más concretamente en las
propiedades biológicas):
► Propiedades estructurales: el lenguaje humano está
compuesto por varios niveles de unidades discretas (dualidad de niveles y
discretidad por Altmann). En la comunicación humana las combinaciones de las
unidades sin unificado son ilimitados y en algunos monos son bipartitas.
Propiedades biológicas
► Propiedades biológicas: existen distintos elementos para
los que también podemos encontrar correlatos en el mundo animal:
- Adquisición gradual del lenguaje: lo que se pueda aislar
distintas etapas en el lenguaje humano. En algunas especies también es posible
señalar distintas etapas en el desarrollo similar a la de los niños.
- Lateralización: en lenguaje humano hay una dominación
cerebral en el hemisferio izquierdo, pero tampoco es exclusivo de los humanos
ya que las aves, por ejemplo, también poseen la lateralidad con dominancia del
hemisferio izquierdo.
Propiedades biológicas II
- Período crítico de adquisición: Lennenberg fue el primer
autor que formuló la existencia de este período, donde los humanos adquieren el
lenguaje con la máxima eficacia; va desde el nacimiento hasta los 12 años. En
esta etapa el niño puede aprender a hablar otras lenguas además de la materna
con fluidez. Una vez pasada esta etapa el niño va a tener dificultad para
adquirir la lengua natural u otras lenguas, por lo que no se alcanza una
competencia lingüística como en este periodo.
En el reino animal sí se pueden encontrar periodos críticos o
que son ideales para la adquisición de un sistema de comunicación, como es el
caso del pinzón, que nace con un patrón innato del canto, pero que
posteriormente tiene que estar expuesto al canto de los machos para adquirir
mayor fluidez y variedad en su canto.
Propiedades biologicas III
- Discriminadores innatos de rasgos: existen pruebas de que
los seres humanos nacemos con la capacidad de discriminar diferentes sonidos
del habla (sorda / sonora). Sin embargo también se encuentra en animales,
fundamentalmente en mamíferos (chinchillas) aunque en menor grado.
Propiedades pragmáticas
► Propiedades pragmáticas: los seres humanos somos capaces de
producir un número infinito de enunciados, pero además también utilizamos un
complejo número de estrategias pragmáticas para descifrar los mensajes del
hablante. Existen razones que nos dicen que hay mecanismos de interpretación
pragmática en el reino animal pero se desconocen su naturaleza; algunas de
estas razones son debidas al importante papel que desempeña el contexto en el
momento de establecer cual es el mensaje que subyace a un acto de comunicación
(las abejas diferencian por la danza la localización de la fuente de alimento
de la de la ubicación potencial de una nueva colmena).
Lenguaje
Una vez concluidas dichas propiedades y, a modo de
conclusión, se ha de saber que hasta ahora hemos presupuesto que el lenguaje es
una capacidad exclusiva del hombre, a través de la cual se manifiesta su
inteligencia, pero no está nada claro que no haya algo así como un lenguaje
animal y, parece por lo tanto, que no es posible excluir que los animales
tengan una cierta inteligencia semejante a la humana. Si esto fuera así, la
distinción entre el hombre y el animal no sería esencial, sino gradual; y el
hombre podría haber surgido, por evolución, a partir de otras especies
animales.
domingo, 19 de mayo de 2013
Ballena solitaria
En las profundidades del Pacífico Norte una ballena deambula en solitario desde hace décadas, algunos criptozoólogos creen que podría ser un híbrido entre una ballena azul y otra desconocida. Esta ballenas ha sido bautizada como "ballenas 52" ya que emite su canto a la extrañisima frecuencia de 52 Hertzios, justo por encima de la nota mas baja de una tuba, pero mucho mas alta que el resto de sus compañeras, cuyas comunicaciones se dan entre los 12 y 25 Hz.
La ballena 52 canta en tan “alta baja frecuencia” que otras ballenas, aparentemente, no la oyen y no pueden responderle.No sólo las ballenas hembras que buscan el apareamiento, sino todas las ballenas. Al envejecer, la 'voz' de la ballena se volverá aun más baja, lo que significa que es menos probable que pueda ser oída por otros ejemplares a medida que pasa el tiempo, condenándola a la soledad.
Ballena Solitaria II
Para empeorar aun mas la situación de este animal, la ballena 52 tampoco sigue las rutas de migracion de las demás ballenas barbadas, por lo que se elimina la posibilidad de que pueda encontrarse con otra ballena.
Algunos criptologos han llegado a sugerir que esta ballena podria estar enferma, pero el hecho de que halla podido sobrevivir durante mas de 19 años nos muestra que no hay nada malo en su forma de "hablar" solo que lo hace demasiado alto.
Pero el hecho de que su canto sea tan alto hace que sea muy fácil localizarla lo cual es muy beneficioso para los biólogos que durante años han estudiado a esta ballena.
En los ultimos años se ha especulado con que esta ballena podría ser un hibirido entre dos especies o incluso el ultimo superviviente de una especie desconocida y cantan su desafinada canción en una búsqueda fracasada de otra ballena de su especie.
Con el paso de los años su voz se hara tan profunda que ni siquiera los radares de los hombres podran escucharla.
Muestra del canto de la ballena 52
Algunos criptologos han llegado a sugerir que esta ballena podria estar enferma, pero el hecho de que halla podido sobrevivir durante mas de 19 años nos muestra que no hay nada malo en su forma de "hablar" solo que lo hace demasiado alto.
Pero el hecho de que su canto sea tan alto hace que sea muy fácil localizarla lo cual es muy beneficioso para los biólogos que durante años han estudiado a esta ballena.
En los ultimos años se ha especulado con que esta ballena podría ser un hibirido entre dos especies o incluso el ultimo superviviente de una especie desconocida y cantan su desafinada canción en una búsqueda fracasada de otra ballena de su especie.
Con el paso de los años su voz se hara tan profunda que ni siquiera los radares de los hombres podran escucharla.
Muestra del canto de la ballena 52
sábado, 18 de mayo de 2013
Una tarde a mitad de la década de los 80 mi esposa y yo volvíamos de un crucero por el puerto de Bostón, cuando decidimos dar una vuelta por los muelles. Cuando pasábamos por el acuario de Boston una voz grave los gritó ''¡Eh! ¡Eh! ¡Largo de ahí!''. Pensando que por error habíamos entrado en algún lugar prohibido, nos paramos y miramos a nuestro alrededor buscando a un guardia de seguridad o alguna señal de advertencia. La voz retumbó de nuevo ''¡Eh! ¡Eh tú!''. Siguiendo la voz nos fuimos aproximando a un gran estanque rodeado de cristal, situado frente al acuario, en el que cuatro focas parecían estar confinadas a modo de exhibición. Con gran incredulidad identifiqué como origen de las advertencias a una gran foca que descansaba en posición vertical en el agua, con su boca ligeramente abierta y girando a un lado y a otro lentamente. La foca no me estaba hablando a mi, sino al aire y casualmente a cualquiera al alcance del oído que tuviera el cuidado de escuchar.
Deacon (1997)
Deacon (1997)
Arbitrariedad
Algunas palabras en las lenguas parecen ''imitar'' los sonidos producidos por algunos objetos o actividades, de ahí que parezca que la conexión sea menos arbitraria. Algunos ejemplos en español serían cucú, arrullar, tartamudear o ronronear. Sin embargo, en español estas onomatopeyas son relativamente escasas. En cambio, en el caso de la mayoría de las señales que emplean los animales para comunicarse parece existir una clara conexión entre el mensaje que transmiten y la señal que utilizan para transmitirla. La impresión de que las señales empleadas por los animales no son arbitrarias puede estar estrechamente relacionada con el hecho de que todos los animales cuentan con un conjunto finito de señales para comunicarse. Es decir, todos los tipos de comunicación animal tienden a producirse a merced de un conjunto limitado y fijo de elementos gestuales o vocales. Muchos de estos elementos se utilizan únicamente en situaciones específicas (por ejemplo, para delimitar el territorio) y en momentos concretos (por ejemplo durante la época de celo).
jueves, 16 de mayo de 2013
Ballenas
Existen dos subórdenes de ballenas: las ballenas barbadas y las ballenas dentadas. Se diferencian no sólo en sus hábitos de alimentación, sino también en la forma de comunicarse las unas con las otras. Las ballenas dentadas se comunican unas con otras a través de la ecolocalización y son capaces de enviar y escuchar sonidos que viajan varios kilómetros antes de rebotar y volver hacia su emisor. La razón por la que las ballenas se comunican de esta manera, utilizando ec localización, se debe a que no poseen oído interno.
Las ballenas son animales extremadamente inteligentes. Al igual que los homínidos, su neocortex cerebral contiene las llamadas “neuronas en huso”, unas células implicadas en las conductas sociales: el lenguaje y las emociones.
Las ballenas son animales extremadamente inteligentes. Al igual que los homínidos, su neocortex cerebral contiene las llamadas “neuronas en huso”, unas células implicadas en las conductas sociales: el lenguaje y las emociones.
Una ballena produce un sonido que envía a través del agua y rebota en objetos o animales. Las ballenas tienen una capacidad especial para obtener información sobre la forma y la distancia del objeto con que el sonido chocó.
El sonido también se utiliza para la reproducción en algunas especies de ballenas donde se desarrolla un canto especial.
Ballenas II
Algo muy característico en la forma de comunicarse de la ballenas es su canto. Solo las ballenas barbadas (ballena azul, ballena jorobada, ballena gris...) se comunican de esta forma.
Se cree que el canto de la ballenas sirve como método para atraer a la hembra en época de apareamiento, ya que solo las ballenas macho producen este "canto". Es importante entender que las ballenas no cantan como lo hacemos nosotros, pues no tienen cuerdas vocales y no les es necesario exhalar aire como lo hacemos nosotros cuando cantamos.
Hace mas de tres décadas se descubrió una ballena en el Pacifico Norte que "cantaba" a 52Hz, la ballena solitaria
Se cree que el canto de la ballenas sirve como método para atraer a la hembra en época de apareamiento, ya que solo las ballenas macho producen este "canto". Es importante entender que las ballenas no cantan como lo hacemos nosotros, pues no tienen cuerdas vocales y no les es necesario exhalar aire como lo hacemos nosotros cuando cantamos.
- Un canto de ballena típico dura hasta 30 minutos.
- Las ballenas no necesitan exhalar para cantar, lo que hace que los científicos crean que se pueden reciclar el aire dentro de sus cuerpos, de alguna manera.
- Los machos de un mismo grupo cantan la misma canción, pero esta cambia de estación en estación.
Hace mas de tres décadas se descubrió una ballena en el Pacifico Norte que "cantaba" a 52Hz, la ballena solitaria
lunes, 13 de mayo de 2013
Las Abejas
LAS ABEJAS.
INTRODUCCIÓN: EL "LENGUAJE
DE LAS ABEJAS"
Esto te podrá parecer un cuento de hadas, pero el hecho de que las
abejas tienen su lenguaje es muy cierto. Si hay numerosos animales que tienen
una voz para expresarse, esta voz les sirve muy a menudo para expresar sus
propias sensaciones. Las abejas por el contrario, hablan una lengua que les
permite dar una serie de informes y a veces, hasta consejos útiles.
Apenas acaba de salir el sol; el rocío
matutino cubre con millones de radiantes gotas iridiscentes la hierba, las
hojas de las plantas y de los árboles y los pétalos de las flores multicolores.
La colmena, a la vera de un seto, parece abandonada, muerta. A poco una abeja
solitaria sale, se orienta y emprende el vuelo. Instantes después , otras
imitan a la primera.. Son las abejas exploradoras, tenaces buscadoras de
alimento.
Su misión es descubrir flores en sazón, con la
corola abierta, llenas de néctar y enteras cubiertas plenamente de polen,
materia que necesitan las abejas obreras para producir la cera. Ésta servirá
para hacer los panales en que, después, almacenarán la miel elaborada en su
estómago, con el dulce jugo libado.
Minutos más tarde, y brillando bajo los rayos
del sol como insectos de oro, ahítas de néctar y cubiertas de polen, retornan
algunas exploradoras. Entran en la colmena y salen enseguida conducidas por las
obreras y dan inicio a una danza enigmáticamente alocada. Las obreras se
arraciman detrás de las exploradoras, siguiendo meticulosamente la danza y,
poco a poco, ávidas, parten en línea recta hacia la fuente del alimento
indicada por sus compañeras, que sin vacilaciones es localizada de inmediato.
Las Abejas II
¿Cómo se produce este hecho portentoso? ¿Por
qué las obreras encuentran tan fácilmente la fuente alimenticia descubierta?
Las exploradoras no las conducen físicamente a las flores escogidas; las
obreras van solas directamente y sin errores de orientación. La conclusión
es sencilla: las exploradoras comunican de algún modo a las obreras el lugar
exacto donde se encuentran los alimentos localizados por ellas. Esto es, las
abejas han desarrollado a través de miles y miles de años un medio de
comunicación propio, un lenguaje especifico, el llamado “lenguaje de las
abejas”.
Este medio de comunicación ha sido objeto de
una larga serie de estudios, observaciones y experimentos que los especialistas
vienen realizando desde hace mucho tiempo. En 1948, August Krogh publicó un
trabajo muy documentado, describiendo detalladamente el método que emplean las
abejas para comunicarse entre sí. Más recientemente, es Karl von Firsch quien
ha llevado a cabo un trabajo impresionante para registrar con toda certidumbre
el comportamiento de esos animalitos, venciendo un sinnúmero de obstáculos y
dificultades con su extraordinario espíritu científico y su enorme capacidad
analítica, desplegados a través de dos décadas de investigación acuciosa y
exhaustiva.
Los experimentos realizados por von Frisch han
demostrado la precisión absoluta con que las abejas obreras llegan a una fuente
de alimento descubierta por las abejas exploradoras. Para establecer firmemente
el hecho, el investigador colocó al alcance de las exploradoras un alimento
atractivo: azúcar diluido en un grupo de flores previamente escogido en un
jardín botánico.
Las plantas seleccionadas eran de un tipo
generalmente no visitado por las exploradoras. Pocos minutos después que estas
descubrieron las flores enriquecidas y abandonaron el jardín, llegaron a él
gran número de obreras procedentes de la colmena, las cuales se dirigieron sólo
a las flores en que las exploradoras se habían alimentado, ignorando totalmente
los oros setecientos tipos de flores existentes en el lugar.
Las Abejas III
Los olores
¿Cómo las exploradoras transmitieron a sus
compañeras la información sobre el tipo de flor, la abundancia del alimento, la
dirección y la distancia en que se encontraba en relación con la colmena? –
Algunas respuestas parecen obvias: la exploradora regresa con el aroma
específico de las flores impregnado en su cuerpo cubierto de polen y el
estómago repleto de fragante néctar que comparte con las obreras, dándoles a
probar un poco a cada una.
Después de cuidadosos experimentos, von Frisch
determinó que las abejas utilizan esos dos perfumes para identificar la fuente
alimenticia, la cual, además, es marcada con un aroma propio que la exploradora
expele sobre las flores escogidas con una glándula especial que posee.
Sin embargo, el olor únicamente puede ayudar a
las obreras a localizar el alimento cercano a la colmena, pero no para conocer
la cantidad disponible, la calidad del néctar y, mucho menos, para establecer
la situación y la distancia que con frecuencia es mayor a una milla.
Las Abejas IV
La danza
En observaciones minuciosas hechas por Frisch
y sus ayudantes, descubrieron otro dato interesante: cuando la exploradora
regresa de una fuente alimenticia cercana (menos de 50 yardas) realiza un
movimiento redondo llamado “danza circular”. Las abejas obreras siguen a
la abeja danzante y la tocan con las antenas. Pero, cuando aumentaron la
cantidad y la calidad del alimento artificial, comprobaron que las abejas
danzaban con más velocidad y mayor vigor, lo que les llevó a suponer que las
obreras conocen la riqueza y la abundancia del hallazgo por la rapidez y la
fuerza de la danza de su compañera exploradora.
Ahora bien, estos movimientos no revelan por
si solos la dirección precisa de la fuente localizada. Para verificar esto, von
Frisch hizo el siguiente experimento: colocó cerca de la colmena un plato con
alimento, perfumándolo con lavanda, y lo rodeó de otros platos igualmente
perfumados, pero vacios. Cuando las exploradoras regresaron con su mensaje a la
colmena, quito el plato lleno y puso uno vacío en su lugar. Recibido el mensaje
por las obreras, emergieron en tropel de la colmena y se lanzaron ávidamente a
buscar el alimento, desperdigándose entre todos los platos. Al parecer, las
exploradoras habían informado que el néctar estaba cerca, aunque, obviamente no
habían comunicado exactamente en qué plato se encontraba.
Una vez más, von Frisch repitió el experimento,
colocando los platos más lejos de la colmena. ¿Qué ocurrió entonces? Algo
totalmente diferente: a una distancia de 200 yardas, casi todas las obreras
fueron directamente hasta los platos más cercanos a aquél en que las
exploradoras habían comido. ¿Por qué? Porque las exploradoras danzaron de
distinta forma, haciendo los movimientos necesarios para indicar la distancia y
la dirección.
Las Abejas V
En lugar de la simple danza circular, que no
ofrece los datos mencionados, ellas efectuaron una “danza oscilante”, moviendo
el vientre de un lado a otro. En esta danza oscilante, la exploradora corre
directamente sobre un estrecho camino imaginario, repentinamente da un viraje
de 360 grados a la izquierda y no menos repentinamente a la derecha, repitiendo
varias veces la secuencia.
La distancia entre la colmena hasta la fuente
alimenticia descubierta, según Frisch, es indicada con gran precisión por la
velocidad de las vueltas de 360 grados dadas por la abeja exploradora. En
cambio, la dirección de la línea recta entre las vueltas a la izquierda y a la
derecha, señalan la dirección de la senda del vuelo. Las abejas “calculan” el
ángulo de la senda de vuelo por medio de una línea imaginaria recta entre la
colmena y el sol, sea cual sea la posición que éste ocupe en el cielo.
La figura que traza es una especie de ‘8’ alargado por el centro. El
trazado de este ‘8’ significa la dirección en que se encuentran las flores con referencia
al sol. La velocidad con que se desplaza y el número de palpitaciones de su
abdomen expresan la distancia a recorrer. Cuanto más lejos estén las flores más se agita y
tiembla la abeja. Por ejemplo, de seis a ocho latidos efectuados en 15 segundos
significa que es preciso ir a 400 metros de la colmena, pero si en el mismo
tiempo el abdomen late 10 u 11 veces es que las flores están a 700 metros. Una
agitación violenta se apodera entonces de la colmena, todas las cosechadoras se
ponen en movimiento, imitando los de la danzarina antes de lanzarse a la
búsqueda del botín.
Este “cálculo” no requiere luz solar directa
pues las abejas conocen la posición del astro por la llamada “luz polarizada” y
son capaces de verlo a través de una gruesa capa de nubes, exactamente igual
que los seres humanos.
Las Abejas VI
El lenguaje completo
Como puede verse, el lenguaje de las abejas
resulta sumamente complejo: por lo menos requiere el uso de tres sentidos: el
olfato, el tacto y la vista y sirve a estos insectos para trasmitir, al mismo
tiempo información precisa sobre la cantidad de alimento encontrado, la calidad
que tiene y la dirección y distancia en que la fuente alimenticia se halla.
–sin este medio de comunicación, la colmena, mejor dicho, la especie toda, no
podría sobrevivir y, menos aun, mantener la estupenda organización social que
la caracteriza, la cual tiene como base el principio de “la división del
trabajo”.
Pero no solo tienen las abejas un lenguaje, un
medio de comunicación entre sí, sino que dentro de la estructura de ese
lenguaje común a todas las variedades de abejas, se encuentran diferencias
sutiles que prueban la existencia de formas de expresión propias de cada una de
ellas, esto es, de “dialectos”.
Karl von Frisch y sus ayudantes llegaron a
descubrir variantes en la forma de expresión entre las abejas gigantes, las
enanas, las índicas, las italianas y las austriacas, las cuales, aunque siguen,
en general un patrón común, usan ciertos movimientos peculiares que diferencian
su medio de comunicación, su lenguaje del de las demás, exactamente igual a
como ocurre con cualquier dialecto respecto al idioma madre y los dialectos
entre sí.
Las Abejas VII
Las abejas y el hombre
A primera vista puede parecer que las abejas
son útiles al ser humano únicamente como productoras de miel y cera, pero no es
así. Nuestro mundo –el mundo humano- y el mundo de las abejas son
interdependientes, forman un mundo simbiótico. Si las abejas desaparecieran, el
hambre haría estragos, porque la tarea de polinización que realizan estos
pequeños y familiares insectos es fundamental en la agricultura mundial; todo
en la naturaleza está sincronizado a favor del ser humano y si llegare a faltar
alguno de sus componentes la situación para el hombre se dificultaría un poco.
La explotación de las abejas para aprovechar
la miel proviene de los tiempos prehistóricos. Restos hallados en la Cueva de
las Arañas, cerca de Valencia, España, prueban que ya en la Edad de Piedra los
hombres cogían la miel producida por las abejas. Algún tiempo después, el
hombre aprendió que las abejas podían ser semi-domesticadas. En los
jeroglíficos egipcios, que datan de 2600 años a.C, se describen métodos
avanzados de apicultura. Y todavía más tarde, el hombre comprendió que para
intervenir en el proceso natural de polinización, para asegurar buenas
cosechas, tenía que utilizar a las abejas, asegurándose de tener colmenas
disponibles, cuando llegaba la estación de la fecundación de las plantas.
Las Abejas VIII
En los EE.UU las abejas representan entre el
85 y 90 por ciento de todos los insectos polinizadores, y más del 50 por ciento
de las semillas de todos los vegetales que se siembran en los diferentes
lugares del mundo provienen de California. Los vegetales que producen las
semillas son polinizados por las abejas. Si ellas faltaren en su tarea, ¿qué
pasaría? Un experto agrícola norteamericano afirma: “Si uno carece de las
abejas, tampoco tendrá semillas. Es más, si no hubiese abejas, tampoco habría
leche, ni industria láctea sobre la faz de la tierra”.
Las moscas, las mariposas, las polillas, los
mosquitos y las avispas visitan las plantas floridas y distribuyen una pequeña
cantidad de polen, pero ninguno de esos insectos realiza esa función tan
ampliamente como la abeja. Una colonia de las más conocidas y laboriosa, Apis
mellifera, contiene de 20 a 60 mil abejas, y la vasta mayoría de ellas se pasa
casi todo el tiempo de su vida –de dos a seis meses- buscando el néctar.
Delfines
DELFINES
Producción de sonido
Los delfines dependen ampliamente en la
producción y recepción de sonido para navegar, comunicarse y para cazar en
aguas oscuras o lóbregas. La laringe del odontocetes no posee cuerdas vocales,
pero los investigadores han teorizado que por lo menos una cierta producción de
sonido se origina en la laringe. Los primeros estudios sugirieron que los
silbidos eran generados en la laringe mientras que los chasquidos eran
producidos en la región nasal. La frecuencia de los sonidos producidos por un
delfín nariz de botella está en los rangos de 0.25 a 150 kHz.
Delfines II
Inteligencia y comunicacíon
Delfines III
Ecolocalización
La comunicación entre los delfines se basa en
la ecolocalización. El término de ecolocalización se refiere a una capacidad
que los odontocetes (y algunos otros mamíferos marinos y la mayoría de los
murciélagos) poseen que les permite localizar y discriminar objetos por las
ondas acústicas de alta frecuencia de proyección y escuchar ecos. Las ondas
acústicas viajan a través del agua a una velocidad de cerca de 1.5 km/sec, lo
cual es 4.5 veces más rápido que el sonido que viaja a través del aire. Estas
ondas acústicas rebotan en los objetos en el agua y regresan al delfín en forma
de eco. El cerebro recibe las ondas acústicas en forma de impulsos nerviosos
que retransmiten los mensajes del sonido y permiten al delfín interpretar los
significados del sonido. Debido a este complejo sistema de ecolocalización, los
odontocetes pueden determinar el tamaño, forma, velocidad, distancia,
dirección, e incluso un poco de la estructura interna de los objetos en el
agua. Los delfines nariz de botella pueden aprender y posteriormente reconocer
las firmas del eco regresadas por las presas de sus especies preferidas.
Delfines IV
Lenguaje corporal
los
delfines se comunican sobretodo, mediante el uso del lenguaje corporal, cuyas
normas son muy similares a las de la comunicación entre humanos; en especial
las señales cortas que los humanos utilizamos con más frecuencia en el lenguaje
hablado, son también aquellas que los delfines utilizan para comunicarse entre
ellos.
El Doctor Ferrer expone que este patrón
obedece a la Ley de la brevedad, que también está presente en el lenguaje
humano, los códigos que resulten más eficientes y sencillos para la
comunicación. Los científicos del proyecto estudiaron en particular a los
delfines nariz de botella, en su hábitat en Nueva Zelanda.
David Lusseau de la Universidad de Aberdeen,
explica que de forma natural el lenguaje entre los delfines se basa en sonido y
movimientos corporales, estos en particular, se pueden clasificar hasta en
cuatro unidades distintas, cargadas de significado. Aquellos movimientos
corporales basados en una sola unidad suelen ser los más comunes en su
comunicación.
Un ejemplo de este tipo, según los
científicos, es el clásico chapoteo con la cola, que de acuerdo con las
observaciones puede subdividirse hasta en tres unidades distintas de
significado. La investigación hizo un conteo de hasta treinta movimientos
subdivisibles que permiten hacer el lenguaje entre los delfines mucho más
eficaz y directo.
Los científicos esperan publicar las
conclusiones de su estudio en la revista Complexity y hacen especial hincapié
en el uso de la Ley de la brevedad como norma fundamental de comunicación
utilizada entre animales tanto como entre los humanos.
Loros
LOROS
¿Por qué “hablan” los loros? ¿Para qué les sirve esta habilidad en la
Naturaleza?
Los loros, del mismo modo que el hombre, articulan la lengua para
vocalizar y así modificar los sonidos que emiten, según ha descubierto un
equipo de científicos, cuyo hallazgo da nuevas pistas para la comprensión del
sistema de comunicación oral de algunos pájaros.
Virginia Morell trata de darnos la respuesta en Science. Durante 24 años
se ha estudiado la comunicación mutua entre un grupo de loros en estado salvaje
en Venezuela. Se creía que los loros imitan los sonidos del ambiente y que los
machos con un repertorio más amplio de imitaciones impresionan más a las
hembras.
Pero los investigadores han descubierto que la respuesta correcta es
que los loros son aves sociales y se imitan los unos a los otros. Los loros
emiten llamadas de contacto y las utilizan para su cohesión social, como si los
loros pronunciaran sus propios “nombres” y los nombres de sus compañeros.
Loros II
En cautividad los loros repiten esta conducta con los sonidos emitidos
por sus dueños. Más aún, los espectrogramas de los sonidos emitidos por los
loros de un mismo grupo tienen marcas que permiten identificarlos como miembros
de dicho grupo, como si se tratara de los “apellidos” comunes a todos. Más aún,
los padres emiten una llamada distintiva (le ponen un “nombre”) para sus
polluelos que estos aprenden cuando tienen entre 3 y 4 semanas de edad. Estas
llamadas (“nombres”) que les ponen sus padres son utilizadas por el loro para,
tras ciertas modificaciones, construir su propio “nombre propio.” En un grupo
grande de polluelos, los padres pueden localizar a sus propios polluelos
gracias a estos “nombres” sonoros, y al revés, los polluelos pueden identificar
a sus padres gracias a las de ellos.
martes, 30 de abril de 2013
Prevaricación
El ser humano tiene la capacidad de mentir de manera
intencional, es decir, puede engañar a otros a sabiendas de que lo
está haciendo. Esta capacidad del lenguaje humano es llamada en
lingüística prevaricación. Dicha característica no es reproducida
por los animales, pues no son capaces de transferir un mensaje cuyo
contenido sea falso, es decir, un animal puede emitir su grito de
alerta aunque no venga un depredador, pero solo si él cree que
viene. Por tanto, el contenido del mensaje transmitido entre animales
siempre estará determinado por la naturaleza. Esta es una definición
académica ampliamente aceptada, aunque se le pueden poner
objeciones. Por ejemplo, un gato, cuando se siente amenaza arquea el lomo y eriza el pelaje con la
intención de intimidar a su oponente tratando de parecer más grande
y agresivo, y así hacer ver a su enemigo que es una amenaza para él.
Pero eso, ¿no es mentir? ¿No es prevaricar acerca de tu tamaño? El
gato no sabe que está mintiendo acerca de su tamaño. Si no se
sintiera amenazado, no lo
haría.¿No hay moscas que presentan una
coloración parecida a la de las avispas, para que los sapos crean
que son venenosas y no las coman? ¿No hay insectos que imitan con la
forma y el color de su cuerpo el aspecto de las hojas?
¿No hay mariposas que tienen llamativos colores en sus alas, para
que los pájaros piquen atraídos por esos colores
y
no lo hagan en el cuerpo, donde una herida sería mortal? En la
mayoría de estos casos, no existe una intencionalidad de
comunicación. El insecto palo
parece un palo porque su genoma lo determina. En realidad, no está
emitiendo un mensaje, solo se está camuflando. En el
caso de los gatos, tampoco podemos hablar de intención. Su respuesta
es instintiva. El gato no sabe que está mintiendo acerca de su
tamaño. Si no se sintiera amenazado, no
lo haría.
lunes, 29 de abril de 2013
Comunicación animal 1
Los animales tienen la capacidad de comunicarse y la utilizan para transmitir sus deseos o intenciones con otros seres de su entorno. Sólo se comunican cuando tienen algo importante que decir, puesto que sus señales pueden ser escuchadas por otros animales no deseados. Por ejemplo:
- Para reproducirse: muchos animales atraen a su pareja emitiendo en el sudor o la orina ciertas hormonas (feromonas) que resultan sumamente atractivas para su especie al olerlas.
- El hallazgo de alimento: Las abejas emiten complejos mensajes químicos y kinesicos para indicar a sus compañeras del panal dónde se encuentra la comida.
- Aviso de peligro: las jirafas hacen gruñidos bajos o silbidos para indicar que están en peligro para protegerse de los demás
- Engañar a sus depredadores : El chortilejo o frailecillo hembra al avistar un depredador cerca de su nido arrastra un ala, como si la tuviera rota, para atraer la atención del depredador sobre ella. Cuando se lo ha llevado a una distancia considerable emprende el vuelo con normalidad.
- Identificar animales de la misma especie: Los sapos y las ranas usan cantos distintos para no aparearse con animales de distinta especie.
- Identificar al individuo: Cuando nos encontramos con una especie altamente sociabilizada como los chimpancés o los delfines, el animal se comporta de manera distinta según con quien se relacione. Los delfines se pueden reconocer por el silbido.
- Comunicarse con el grupo: Los lobos aúllan tras una cacería para reunir a toda la manada.
Unilateral y bidireccional
La transmisión de los animales puede calificarse de
unilateral. Por el contrario, el lenguaje humano permite el
intercambio de mensajes en forma bidireccional. Es decir, las
personas pueden hacer uso del diálogo para intercambiar mensajes,
mientras que la especie animal no conoce tal ventaja, ni tal estado
de reciprocidad lingüística.
Escritura
La señal vocal del
lenguaje humano puede ser representada por medio de signos que
reproducen su contenido fónico, silábico o semántico. Estos signos
es lo que se llama escritura. La
comunicación animal no puede usar este código gráfico, ya que su
capacidad física e intelectual no excede esa virtud. Por tanto, el lenguaje humano presenta muchas ventajas sobre cualquier sistema
de comunicación animal.
Dualidad
El lenguaje humano está
organizado en dos niveles. Esta propiedad es lo que
se conoce como dualidad o doble articulación. En uno de estos dos
niveles tenemos sonidos diferentes, y en otro tenemos significados
distintos. Esta dualidad de niveles es, de hecho, uno de los rasgos
que contribuye a hacer del lenguaje humano un sistema económico y
que mediante un conjunto limitado de diferentes sonidos podemos
generar un número extremadamente elevado de combinaciones con
significados distintos. En el caso de los
animales, cada señal comunicativa parece consistir en una forma
única y fijada que no puede descomponerse en partes diferentes.
viernes, 26 de abril de 2013
Desplazamiento
La comunicación animal
está diseñada exclusivamente para el momento presente: para el aquí
y el ahora. No puede utilizarse para relacionar sucesos situados
lejos en el tiempo y en el espacio. En cambio, los seres humanos si
pueden hacer referencia a tiempos y espacios pasados o futuros,
además de presentes. Esta propiedad del lenguaje humano se llama
desplazamiento y es fundamental para el progreso cultural y técnico. Gracias a ella podemos transmitir nuestros descubrimientos a los demás, a diferencias de la mayoría de los animales, que reflejan estímulos ambientales inmediatos. De hecho, el desplazamiento permite hablar, incluso, acerca de cosas
y lugares de cuya existencia no podemos estar seguros. Por regla
general, se considera que la comunicación animal carece de esta
propiedad. Sin embargo, el sistema que emplean las abejas para
comunicarse tiene la propiedad del desplazamiento, pero de forma
extremadamente limitada. Una abeja puede lograr que otras se dirijan
hacia una fuente de alimento pero ha de ser hacia una fuente de
alimento reciente, no puede ser hasta néctares futuros.
Creatividad
Para poder describir
nuevos objetos y situaciones los seres humanos crean constantemente
nuevas expresiones y nuevos enunciados mediante la manipulación de
los recursos lingüísticos de los que disponen. Esta propiedad
designada como productividad, creatividad (Chomsky) o carácter
abierto nos permite transmitir nuevas experiencias a nuestros
receptores. El número de enunciados en cualquier lengua humana es
infinito. Por el contrario, la comunicación animal no posee este
tipo de flexibilidad: los animales no pueden producir señales nuevas
y son incapaces de modificar su sistema de comunicación para crear
un mensaje nuevo. Esta característica limitante inherente a la
comunicación animal es lo que se denomina referencia fija. La abeja
obrera, que normalmente es capaz de comunicar el lugar donde se
encuentra el néctar, no podrá hacerlo si dicho lugar es realmente
nuevo.
jueves, 25 de abril de 2013
Transmisión cultural
Heredamos rasgos físicos de nuestros padres, pero no la lengua que hablamos. Es decir, todo el mundo adquiere una lengua en el contexto de una cultura determinada de una forma que no tiene nada que ver con los genes familiares. Pongamos un ejemplo: un niño nacido de padres coreanos, que sea adoptado y criado por hablantes de inglés americano, manifestará determinadas características físicas heredadas de sus padres biológicos, pero inevitablemente hablará ingles. Así pues, resulta evidente que los seres humanos nacen con una predisposición innata para adquirir el lenguaje, es decir, todos los niños nacen con la posibilidad de desarrollar el lenguaje, pero para que esa capacidad llegue a desarrollarse es necesario que se produzca la transmisión de una generación a otra, fundamentalmente, por medio de un proceso de enseñanza y aprendizaje. Este proceso se ha denominado transmisión cultural. La mejor prueba de esta característica nos la ofrecen los niños que se crían aislados del resto de los seres humanos, pues normalmente no desarrollan el lenguaje o lo hacen de un modo rudimentario. En el caso de la comunicación animal, los individuos nacen dotados de un juego de señales específicas que se generan de forma instintiva. En algunas especies de pájaros existen evidencias de que el instinto se combina con el aprendizaje para producir el canto correcto. Si estos pájaros pasan sus primeras siete semanas de vida sin oír a sus congéneres, producirán de forma instintiva cantos o llamadas, aunque estos serán de alguna manera anormales. En cambio, si los niños humanos crecen aislados, no producen ninguna lengua de manera instintiva. Por tanto, los animales no aprenden el sistema de comunicación como lo hacen los seres humanos, pues en ellos ese sistema es completamente innato e instintivo
martes, 16 de abril de 2013
Comunicación animal 2
En la anterior entrada hablamos de que los animales tambien son capaces de
comunicarse con los seres de su entorno.
Ahora veremos que los animales se comunican
por medios muy variados:
- Comunicación visual: Consiste en la emisión de señales
que pueden ser percibidas por los órganos de la vista. Los mensajes visuales se pueden comunicar por una
gran variedad de medios, como el color, la postura o la forma, o
movimientos y su secuencia. La comunicación visual suele ser de dos
tipos: kinésica y proxémica.
§ Kinesica: El animal realiza una
serie de movimientos para dar a entender un mesaje. Es el caso del ave del paraíso
que realiza una danza para atraer a la hembra.
A muchos mamíferos se les eriza el
pelo, arquean la espalda y muestren los dientes con la intención de intimidar a
un posible oponente; tratan de parecer más grandes y agresivos.
§ Proxemica: Es el uso del espacio y las relaciones espaciales. Lo que cuenta es la
distancia que mantiene un animal respecto de otro, una mayor o menor proximidad
puede tener un significado u otro para el que recibe el mensaje. En los caninos como el perro o el lobo, acercarse lentamente agachado a otro miembro de la manada o tirarse exponiendo el vientre puede ser indicador de sumisión.
miércoles, 10 de abril de 2013
Comunicación animal 3
Comunicación acústica: Se refiere a todos los sonidos que el animal produce para comunicarse; los más comunes son los sonidos vocales como el gruñir del perro, el maullar del gato o el chillar de los murciélagos.
En este caso, se emplean diferentes mecanismos para emitir sonidos o ultrasonido que se transmiten a través del aire, el agua o incluso objetos sólidos y que son percibidos a través del oído. Este es el tipo de comunicación que a nosotros nos resulta más familiar, ya que el lenguaje hablado del ser humano es acústico.
Pero también hay sonidos no orales como, por ejemplo, el del grillo al frotar sus patas traseras, el de las cigarras cuando frotan sus alas, el de los simios cuando golpean los árboles con ramas sueltas o los golpes en el suelo que utilizan algunos insectos para comunicarse.
Estas formas de comunicación sin embargo no suponen un lenguaje en sentido estricto, ya que la especie humana es la única que posee un lenguaje formado por sonidos completos.
Algunos ejemplos de este tipo comunicación lo encontramos en:
En este caso, se emplean diferentes mecanismos para emitir sonidos o ultrasonido que se transmiten a través del aire, el agua o incluso objetos sólidos y que son percibidos a través del oído. Este es el tipo de comunicación que a nosotros nos resulta más familiar, ya que el lenguaje hablado del ser humano es acústico.
Pero también hay sonidos no orales como, por ejemplo, el del grillo al frotar sus patas traseras, el de las cigarras cuando frotan sus alas, el de los simios cuando golpean los árboles con ramas sueltas o los golpes en el suelo que utilizan algunos insectos para comunicarse.
Estas formas de comunicación sin embargo no suponen un lenguaje en sentido estricto, ya que la especie humana es la única que posee un lenguaje formado por sonidos completos.
Algunos ejemplos de este tipo comunicación lo encontramos en:
- Los conejos golpean el suelo cuando sienten que están en peligro.
- Los gorilas se golpean el pecho para mostrar agresividad.
- La serpientes de cascabel emiten un sonido con el repicar de sus cascabeles para advertir a sus enemigos
martes, 9 de abril de 2013
Comunicación animal 4
Comunicación química: Este tipo de comunicación se da cuando los seres vivos ya sea de la misma o de diferente especie emiten o usan sustancias químicas que producen un cierto efecto en los demás. Pueden ser de carácter informativo, preventivo o como amenaza.
- Muchos animales atraen a su pareja emitiendo a través de fluidos corporales –como el sudor o la orina– ciertas hormonas(feromonas)
- Las abejas efectúan un complejo despliegue químico y kinésico para indicarle a sus compañeras del panal en dónde se encuentra la comida.
- Los machos adultos de las langostas migratorias liberan una feromona que acelera el desarrollo de los individuos jóvenes de la especie.
- Cuando se molesta o perturba a una hormiga, las glándulas situadas en la cabeza secretan una sustancia química volátil que rápidamente se difunde en todas direcciones. Esta sustancia puede ser captada por otras hormigas situadas a varios centímetros de distancia, las cuales son atraídas por concentraciones bajas de las sustancias y comienzan a moverse hacia el área donde la concentración aumenta. A medida que se acercan a su compañera de nido perturbada, su reacción cambia a una respuesta de alarma.
miércoles, 3 de abril de 2013
Comunicacion Animal 5
Comunicacion tactil: El tacto, como vía de comunicación, posee un alcance limitado en la transmisión
de información, pero constituye el más básico de los canales de comunicación,
porque casi todos los seres vivos responden al contacto físico. La comunicación
táctil es muy importante en los mamíferos, donde algunas de las especies más sociales pasan
gran cantidad de tiempo en contacto físico mutuo.
El acicalamiento es una forma más estructurada de comunicación tactil que ayuda a los primates a establecer un dominio social y a fortalecer los lazos afectivos.
El contacto físico está limitado en su capacidad para comunicarse porque es extremadamente de corto alcance. Muchos invertebrados utilizan antenas como primera línea de contacto con los objetos y organismos. El uso más común de comunicación táctil se produce durante la cópula. La estimulación táctil por los machos a menudo les permitirá saber cuándo una mujer adoptará una postura sexualmente receptiva, como en los roedores
El acicalamiento es una forma más estructurada de comunicación tactil que ayuda a los primates a establecer un dominio social y a fortalecer los lazos afectivos.
El contacto físico está limitado en su capacidad para comunicarse porque es extremadamente de corto alcance. Muchos invertebrados utilizan antenas como primera línea de contacto con los objetos y organismos. El uso más común de comunicación táctil se produce durante la cópula. La estimulación táctil por los machos a menudo les permitirá saber cuándo una mujer adoptará una postura sexualmente receptiva, como en los roedores
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